Graciela Hasper among others

<The Latin American Art Museum of Buenos Aires (MALBA) invites Graciela Hasper to participate in joint venture with newspaper LA NACION to publish original artwork "ads" as part of project De Voz a Voz, an effort to bring art to the public admist the shutdowns due to the global pandemic.>

Obras de Marta Minujín, Gachi Hasper, Jorge Macchi y Guillermo Kuitca adoptan un formato tan inusual como los tiempos que vivimos, gracias a un proyecto surgido en Colombia y continuado por LA NACION y el Malba

"No vamos a reabrir como si no hubiera pasado nada. Nos pasó de todo. Hemos trabajado mucho en pensar una reapertura que nos sane, que nos cure del trauma de los seis meses de cuarentena y el miedo al otro", decía días atrás Gabriela Rangel, directora artística del Museo Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), el primero en cerrar sus puertas en la Argentina para prevenir la expansión del coronavirus. El mismo que semanas más tarde sorprendía con una conferencia de prensa internacional por Zoom y luego con el lanzamiento de un museo virtual de performance, además de participar de la creación de la primera red de museos y espacios de artedel país.

Habituado a trabajar en colaboración, vinculado desde hace años con LA NACION para promover la innovación y el desarrollo de la cultura, el Malba aceptó sin dudar la propuesta de observar la "nueva normalidad" a través de la mirada de los artistas. Una iniciativa surgida en Colombia, destinada a iniciar un diálogo regional con el lenguaje intuitivo y universal de la imagen. Una manera de lograr que, aun con los museos cerrados, el arte pudiera llegar a los hogares de los lectores a través de obras desplegadas en un formato inusual: a página completa, para guardar y coleccionar.

"De voz a voz" se titula el proyecto nacido de una alianza entre el Museo de Arte Moderno de Bogotá (Mambo) y la Casa Editorial El Tiempo, expandido al resto del continente gracias a una convocatoria del Grupo de Diarios América (GDA). "Ahora que los museos experimentan con la virtualidad y con numerosas formas de comunicación, creemos que es crucial también concebir estrategias alternativas, capaces de difundir el mensaje del arte y de los artistas, invitándolos a responder a través de sus obras, encontrando un punto de reflexión sobre la condición humana", decía la propuesta dirigida a los principales periódicos de la región. El Comercio de Lima ya anunció que se sumará en los próximos meses, en alianza con el Museo de Arte Contemporáneo (MAC).

"El arte -agregaba- tiene la capacidad paradójica de jugar entre la catástrofe, la reflexión y la comunicación. Siempre ha reaccionado en tiempos de crisis, sacudiendo y despertando la sensibilidad colectiva. Los artistas son enviados especiales que interpretan el presente y en ciertos casos predicen a través de sus observaciones. Los artistas pueden ofrecer más y diferentes perspectivas, al tiempo que proporcionan una mirada disímil, capaz de desafiar nuestra percepción ordinaria de la realidad." La idea era generar acuerdos similares con museos locales, e invitar a su vez a los artistas a compartir "a través de una obra inédita su visión frente a la pandemia, la cuarentena, el aislamiento, y en general frente a la crisis que hoy azota al mundo, como un testimonio del momento más complejo de la humanidad en las últimas décadas".

Mientras el Mambo ya inauguró una muestra con decenas obras publicadas por El Tiempo -que también puede verse en mambogota.com y seguirse en redes sociales con el hashtag #ElMamboDeVozAVoz-, LA NACION decidió tomar la posta con esta edición de #LNteacompaña -la serie de suplementos especiales dedicados a distintos temas, que se publican cada domingo desde el comienzo de la cuarentena-, y convocar al Malba para que seleccionara a cuatro artistas representados en su colección.

Los elegidos fueron Marta Minujín, Gachi Hasper, Jorge Macchi y Guillermo Kuitca, autor de las instalaciones de mapas pintados sobre colchones que se adelantaron hace décadas a las imágenes de hospitales de campaña montados este año en varios países, a medida que se expandía la pandemia. Con obras recientes y testimonios de sus experiencias del aislamiento, acompañadas por el hashtag #Malbadevozavoz, demuestran que la creatividad es esencial para enfrentar la incertidumbre, sanar e imaginar juntos nuevos paradigmas.

Por: Celina Chatruc